El día que el fútbol se volvió un sentimiento el 4/08/2006 10:22:00 p. m.

Me acuerdo cuando entré en el estadio y a duras penas intenté encontrar mi butaca. No la encontré y nunca sabremos donde me tendría que haber ubicado, pero todo eso se olvidó cuando empezó a sonar el himno. La verdad es que he ido a bastantes partidos de fútbol y creo que nunca lo he vivido tanto como en éste, el de la selección galega.

El momento del himno fue impresionante, aunque si se ve ahora en las imágenes de la TVG no lo parece, pero todo el aforo del estadio cantándolo.. fue espectacular.



Me pareció indignante la actitud de la COPE (a.k.a NO-DO) ya que nos llamaron radicales de ultraizquierda (o algo por el estilo) por vivir con tanta intensidad el partido de nuestra selección.
También me pareció una maldita hipocresía, la asistencia de algunos personajes de la anterior legislatura, que fueron los culpables de que no pudiésemos vivir ese momento con anterioridad, ya que hace dos años sólo el pensar en vivir ese partido, era un pensamiento utópico de rojos.

También fue, hablando claramente, una putada que no se hiciese en un estadio más grande. Está bien que Compostela sea la capital y que seguramente se hizo bien en disputar allí el partido, pero la organización también debería haberse dado cuenta de toda la gente que se quedó fuera. La verdad es que si se eligiese otra ubicación, sólo habría habido problemas, ya que el partido habría sido en Riazor o en Balaídos y se eligiese el campo que se eligiese, las afición "afectada" se quejaría por ser en el estadio del eterno rival (para mi el sitio idóneo habría sido Riazor, ya que en Balaidos hay en lugares que se ve bastante poco y mal). Espero que ahora despues de la hermandad de aficiones (los siareirosgalegos trabajan en ello) ayude a que el próximo partido se celebre en un estadio más grande y no influyan estúpidas rivalidades.

Pero bueno, de todas formas, ver el partido casi fue lo de menos, lo importante fue ver a una nación volcada con el equipo y que por fin después de tanto tiempo todos pudimos expresar nuestros sentimientos, sentimientos que durante muchos años fueron ignorados por unos "conservadores-fascistas-romanoapostólicos" y que se sienta ofendido el que se tenga que ofender.